MOTOSIERRA A LA SALUD : Movilización de residentes contra el cierre de las residencias y por salarios.-
2 DE JULIO DE 2025. –Este jueves 3 de julio, residentes y concurrentes de la Ciudad de Buenos Aires llevan adelante un paro con movilización en defensa del sistema de residencias y sus condiciones laborales. La medida fue votada en asamblea como continuidad del reclamo por aumento salarial, pero se profundiza ante la amenaza concreta del cierre de cupos para el ciclo 2025/2026 en hospitales porteños, y los anuncios del gobierno nacional sobre una nueva reglamentación para las residencias en hospitales dependientes del Ministerio de Salud.
Mientras una residente puede trabajar hasta 285 horas mensuales cobrando apenas $4.350 la hora, el gobierno de la Ciudad, en manos de Fernán Quirós, responde cerrando vacantes y reduciendo aún más el acceso a la formación profesional. En paralelo, el Ministerio de Salud de la Nación avanza con un nuevo reglamento que liquida la relación laboral de los residentes y la reemplaza por un sistema de becas sin derechos laborales elementales como el aguinaldo, la antigüedad o los aportes jubilatorios. Un doble ataque que desnuda la orientación común de ajuste y desmantelamiento.
El nuevo esquema propuesto por Nación establece un modelo de “beca anual” con montos definidos discrecionalmente por el Poder Ejecutivo, y un sistema de remuneración fragmentado que obliga a los hospitales nacionales a cubrir con recursos propios lo que el Estado no garantiza. En lugar de reconocer la tarea profesional que desempeñan los residentes como trabajadores del sistema de salud, se los expulsa del marco laboral formal, se precariza su situación y se recorta el presupuesto de las instituciones públicas que los forman.
Frente a esta avanzada, residentes y concurrentes de CABA vuelven a las calles con un mensaje claro: el cierre de residencias, los salarios de miseria y la eliminación de derechos laborales no pasarán sin lucha. La residencia no es una beca ni un curso: es trabajo esencial para el sostenimiento de los hospitales públicos. La defensa de la salud pública empieza por garantizar condiciones laborales dignas y formativas para quienes están en la primera línea.
«La transformación de las residencias en becas implica más precarización laboral y una descentralización total del sistema de salud», sostuvo Lucía Wiguez, médica recién recibida de la UBA.
También se hicieron presentes referentes de partidos de izquierda como Gabriel Solano, legislador por el Partido Obrero en el FIT-U: «En todos los hospitales de la ciudad y del país los salarios no alcanzan, las condiciones de trabajo son paupérrimas y con largas jornadas laborales. Sin residentes no hay hospital. Hay que bancar su lucha y defender la salud pública», sostuvo.
La próxima instancia de lucha es a las 16 horas en Plaza de Mayo donde los trabajadores del Garrahan llevarán adelante una acción contra el desmantelamiento del hospital y en defensa del conjunto de la salud pública, una de las principales víctimas del brutal ajuste oficial. Además convocan a una enorme movilización de todos los sectores para el 17 de julio.